Para evitar que la policía se lleve a Lolo, Richard confiesa ser su padre. En un principio, el joven cree que se trata de una simple broma para evitar su traslado al centro de servicios sociales, pero la confirmación por parte de Richard de que se trata de la verdad provocan una reacción llena de ira por parte del joven.La situación con Lolo se vuelve insostenible y Richard le da la solución para que se convenza de que él es su padre. El creativo le insta a que llame a su madre, la cual confirma la versión de Richard. Traumatizado, el chico paga su frustración arremetiendo contra su recién estrenado padre.