Diego escucha horrorizado como su terapeuta le diagnostica que está enamorado de Adriana, por lo que prefiere pensar que todo se reduce a una mera atracción física. El ex director de Bulevar no puede permitirse esa debilidad y lejos de mostrar sus sentimientos comienza a mostrarse autoritario y distante con ella para evitar tentaciones.Por su parte, Be y Roberto tratan de levantar cabeza tras la ruptura y buscan consuelo en sus amigos. La joven se consuela con Chali y el periodista con su inseparable Aníbal.