A pesar de que la casa de Adriana no es la casa de sus sueños, Be se da cuenta de que es lo único a lo que puede aspirar. Mientras, Be y Roberto continúan con su particular guerra en la redacción de Bulevar 21. Entretanto, Roberto trata de reescribir su novela, pero su falta de inspiración es total y no se siente capaz de escribir una sola línea.