Manuel Aimé llega al hospital para comenzar su primer día de trabajo. El aire acondicionado se rompe y todos los pacientes se quejan.El director de Urgencias da dinero a Rusti para que vaya a comprar abanicos para intentar sofocar el calor de los enfermos. Sin embargo, Aimé decide arreglar el aire acondicionado en el propio hospital, porque al llevárselo tardarían tres días en solucionar el problema.