“Es la mejor imagen que guardo de mi abuelo desde hace muchos años”, nos cuenta Ismael, un piporro de la localidad de Aceuchal que pone en valor la historia de su abuelo, dándole una segunda vida al coche que le vio crecer. “Tenía la satisfacción de arreglar el coche en cuanto me sacase el carnet”, nos cuenta. Después de ponerlo a punto, y con tan solo 18 años, Ismael, lo utiliza “para cargar la cosecha del huerto. Tengo tres huertos que cultivo en mi tiempo libre. Hay lechugas, patatas, cebollas, acelgas…” Asique nosotros no hemos querido perder la oportunidad de visitarlos de primera mano. ¡Allá vamos!