Hemos aprovechado que el Mago Alfred Cobami hace escala en la estación para abrirle la maleta. Cadenas, candados y cuerdas forman parte de sus espectáculos y con ellos ha escapado de lugares como Marruecos o Marsella; el río Guadiana o el mar de Alborán. Si desaparece otra vez búsquenle en Guijo de Santa Bárbara, allí tiene su refugio y allí diseña la magia que nos hipnotiza.
Dice Luis Landero que una ciudad, un paisaje, una tierra no están del todo acabadas hasta que un pintor o un escritor, las colonizan. Luis colonizó Alburquerque y La Raya. Y ha colonizado Madrid, esos barrios de la Prospe y Chamberí. También Lisboa y la Habana. Parece que a Luis no le gusta viajar y a pesar de ello no puede evitar ir colonizando y dejando acabadas, las tierras que pisa.