Las carreteras son una modernidad del siglo XIX y junto a su aparición surgió también el primer sistema para su conservación. Consistía en una organización jerárquica en la que el último eslabón era el peón caminero. Para abordar su misión, los peones habitaban casas en el margen del camino que, por asignación pública, debían mantener en buen uso. Pequeñas viviendas que han formado parte de un paisaje muy familiar al viajero