Llega la época de aceitunas y en todas las almazaras de la región empiezan a recibir kilos y kilos para fabricar el famoso oro líquido. En Valdefuentes se creó la que iba a ser la revolución del aceite extremeño entre los agricultores: moler tus propias aceitunas.
Olga e Isabel son dos placentinas que hace tres años pusieron en marcha el proyecto solidario "Melfas por un sueño". Olga acogió un año acogió a una niña saharaui y tras viajar a los campamentos para conocer de primera mano cómo viven allí. Vio que no tenían nada y se le ocurrió llevarles máquinas de coser para confeccionar con los melfas (telas que utilizan para vestirse) pañuelos y poder venderlos en Plasencia. Una acción totalmente altruista con la cual el beneficio que sacan lo entregan a las familias saharianas para que siguen con el proceso de confección. Hay 16 familias que cosen pañuelos y todos los primeros sábados del mes, Olga e Isabel tienen una cita fija en la plaza de Plasencia para venderlos.
Carmen y Mario
