Durante la dictadura de Pinochet, Pisagua, un pequeño pueblo del norte de Chile, se convirtió en centro de reclusión de presos políticos. Con el desierto de Atacama a sus espaldas, era una cárcel natural perfecta. La antigua prisión, privatizada, fue luego convertida en hotel. Cuarenta años después, un expreso político regresó al lugar y un sindicato de pescadores reclamó la devolución de tierras que aún hoy son zona militar. “Pisagua”: un documental sobre los silencios y las batallas por la memoria en la patria chilena.