Daniel Yranzo y Javier Segarra se dan un paseo por la Muy Noble, Muy Leal, Muy Heroica, Muy Benéfica y Siempre Heroica e Inmortal ciudad de Zaragoza. Su población se multiplica a mediados de octubre, cuando se celebra su semana más grande: las fiestas en honor a nuestra señora del Pilar. Y la ciudad responde agradecida cuando el viajero pisa sus calles, desplegando un amplio abanico de posibilidades gastronómicas: los presentadores encuentran mil tapas diferentes, degustan platos aptos para todo tipo de bolsillos, y se chupan los dedos con los dulces más apetitosos. Y eso es porque la ciudad tiene muy buen materia prima con la que trabajar. Pero, sin duda, lo mejor que ofrece Zaragoza es su gente. Así que, ¿qué mejor cosa que hacer en fiestas que reunirnos con un grupo de amigos en torno a una buena mesa?