'¡Bien Dicho!' estrecha las relaciones de los vecinos de Aragón a través de sus palabras comunes. María de Miguel conoce esta semana a un vecindario muy particular en Fonz (Huesca), formado por “tocinos”, “rayones”, “aucas” y muchas más especies. En Zaragoza, tiene la oportunidad de visitar el Colegio Mayor Universitario Pedro Cerbuna y descubrir que a pesar de que muchos de sus vecinos son aragoneses, les cuesta entenderse cuando utilizan palabras propias de sus lugares de origen, como “morrofiemo” o “Esgangillau”. Mientras tanto, Federico Contín viaja hasta una de las localidades con menos vecinos y más unida de Aragón: Villanueva del Rebollar de la Sierra, en Teruel. Allí, el “mal orache” es una perfecta excusa para “jopar” al “teleclub” y “pillarse un capazo”. María de Miguel coge el “ajadico” para conocer y “charrar” con dos vecinos de huerto en el Barrio de Valdefierro (Zaragoza). Allí reflexionan sobre la “linde” como origen de muchos problemas de buena vecindad.