¡Bien Dicho! conoce a los herederos más tradicionales de Aragón. María de Miguel aprende a “esbrinar” el azafrán en Monreal del Campo (Teruel). Allí una familia entera continúa con la tradición de buscar “melguizas” para perpetuarse. En una panadería de Cariñena (Zaragoza) descubrimos que los bollos pueden ser “tontos”, y que no es lo mismo el “cuscurro” que el “coscurro”. José Ramón Marcuello conoce al sucesor del que le hizo la navaja al “León de Graus”, en su ciudad natal (Graus, Huesca). Allí, aprende cómo una misma familia de “hereus” ha logrado perpetuar su arte de “pais” a “choves” “dende ves-te-ne a saber quán hasta el día de hue”. En Calatayud (Zaragoza) regentamos un negocio donde una familia lleva recibiendo “chorradas” desde antes de que cualquiera del lugar recuerde, y viajamos hasta Salcedillo (Teruel), donde un vecino nos explica cómo se hereda y trabaja la tierra en esta localidad.