¡Bien dicho! recorre el camino de Santiago para recoger todas las palabras que guardan relación con los peregrinos y los principales enclaves de su ruta. Laura López comienza el camino de Santiago en Somport (Huesca) y cruza la frontera “amonico, amonico”, con ganas de hacer una buena “chinta”. Allí, “charra” con unos vecinos que le enseñan lo “polida” que es esa zona pirenaica. En Castiello de Jaca (Huesca), Laura coge fuerzas con unas “ganchadas” de “boliches” muy sabrosos y, una vez repuesta, continúa el camino “cara bajo”. Don Federico llega a Jaca (Huesca) para comenzar el camino. Allí, se encuentra con Laura, que “plega” con dos peregrinos. Los dos visitan la imponente catedral de la ciudad y su “vara jaquesa”. Laura continúa el camino y hace una parada en Arrés (Huesca), donde hace buen uso del “rajo” y cura con una buena cama el cuerpo “espiazau”. Además, el “hospitalero” le ofrece “pa amb tomaca” para reponer fuerzas. A lo largo del camino, Laura disfruta de “boletas” y co