POM llega a París en un carro de verduras y corre a la casa de DARTACAN para contarle acerca de su reunión con el REY prisionero. Al principio, DARTACAN no puede creerle ya que, recientemente, él mismo ha visto al REY en persona. POM repite lo que el REY le ha dicho – cómo fue secuestrado por unos desconocidos y que fue llevado a una celda en el monasterio, con su cara cubierta por un bozal de oro. DARTACAN manda llamar a los tres mosqueperros, y con POM como guía, se dirigen al monasterio. Los guardias de RICHELIEU les ven salir de París. Cuando el cardenal es informado, él les da la orden de que sigan su pista, temiendo que los mosqueperros estén otra vez involucrados en alguna misión secreta, de la que él debería estar al tanto. Nuestros amigos llegan al monasterio. Con la ayuda de POM y su conocimiento del lugar, ellos consiguen rescatar al REY. Ahora ya es de noche y ellos acampan en un bosque.