El padre de Mario aparecerá, un hombre de clase alta y buen estatus profesional, dispuesto a conocer cuáles son las intenciones de su que su hijo, un joven de familia adinerada esté trabajando ahora en un club como chico de mantenimiento. Orson recibirá una llamada amenazante mientras a Sonia comienza a ahogarle las deudas en el club, que poco a poco se va a la quiebra.