Sara Revuelta, jugadora de baloncesto en silla de ruedas, ha dicho que sigue entrenando en casa y se está poniendo el dia en sus estudios. "Creo que esta experiencia nos enseña que no somos conscientes de esa libertad que tenemos, de salir a la calle, de abrazar a los nuestros... la suerte que tenemos", indica. "Nos hará crecer como sociedad", afirma.