Laura Herrera, jugadora del equipo tinerfeño de La Laguna de baloncesto, asegura que lleva bien el confinamiento por el coronavirus, "no me puedo quejar" y mantiene la mente ocupada con "esas pequeñas cosas que el ritmo diario no permitía". "También sigo con mi rutina de entrenamientos dentro de mis posibilidades y trato de estar en contacto con los míos".
Como enseñanza, afirma destaca estar "aprendiendo a relativizar y poner en perspectiva lo que antes considerábamos importante y valorar esas pequeñas cosas que a priori nos parecían insignificantes". "También la salud, que ahora nos concierne y sin ella no podemos hacer nada", añade.
Herrera se muestra optimista respecto a la sociedad y sí cree que habrá un cambio a mejor: "Dentro de lo malo, hay mucha gente implicada que está trabajando para todos e, incluso, la gente que no puede trabajar está tirando de recursos para ayudar. Espero que con el tiempo no se nos olvide".