El impuesto de consumos ahoga a los habitantes de Linares, que no tardan en levantarse en armas contra el alcalde. Liderados por el anarquista Salazar, mantienen a las autoridades atrincheradas en el cuartel bajo la protección de la Guardia Civil. El asesinato del anarquista, que apunta como principal sospechoso al alcalde, hace la situación insostenible y provoca la intervención del Capitán Oliver, que pretende aplastar a los insurgentes contra la opinión de Víctor Ros. Éste tendrá que afinar su intuición y recurso para poder demostrar que no todo es lo que parece. Pero el tiempo corre en su contra.
Mientras él está atrapado por la situación, Juana sigue desaparecida y solo el arrojo de Juan, acompañado por Candela, le podrá dar una oportunidad de vivir. Sin embargo, la suerte puede que no esté de su lado y la Mano Negra termine ganando la batalla