Irene, preocupada por Bárbara, le pide a Leonardo que no le dé falsas esperanzas. Leonardo habla con Bárbara y, aunque no le dice que la quiere, le da a entender que disfruta mucho de su compañía. Bárbara, hecha un lío, le pide consejo a Sol, quien le advierte del peligro de entrar en una relación en la que una de las partes siente más que la otra. Adriana informa a Pedrito de que volverá a vivir en la Casa Grande y al niño le cuesta asimilarlo. Adriana recibe una carta de don Federico, el secretario de su padre, informando de que los Gálvez de Aguirre tratan de averiguar qué posesiones tenía Evaristo. Alejo le lee la novela a Luisa: le encanta, pero la realidad no se parece en nada a lo que narra la novela. Irene advierte a Luisa de los peligros de continuar la relación con su hermano. Adriana se instala en la casa Grande. Alejo le pide a su padre que cancele la boda de Bernardo y Mercedes, le cuenta que sabe lo que hizo su tía, así como que él mismo le confesó quien asesinó a Domingo
