Cuando un artista comienza su vida profesional, en ocasiones siente que él es alguien distinto y que eso que lo diferencia puede convertirse en un obstáculo. Artistas como María Pagés y Luz Casal son muestra de cómo esos impedimentos iniciales se pueden transformar con el trabajo y a la fuerza de su personalidades, en lo más preciado y singular de su arte. La autenticidad es una forma de trascender la estética: “no es que sea bello, es que es verdad”.