Ruth Beitia había saltado 2 metros, quedándose a tan solo 3 cm de la medalla de la rusa Svetlana Shkolina. El metal podía estar al caer, pero la estadounidense Brigette Barret logró alcanzar los 2 '03m en su último intento. Beitia se quedó con un ingrato cuarto puesto. Sin embargo, la rusa que había quedado tercera fue sancionada por dopaje años después. Por ello, a falta de la reasignación oficial del COI, la saltadora española es bronce en Londres 2012. La cántabra explicaba al final de la prueba que tenía una sensación agridulce. Esa frustración de no poder hacerse con la medalla hizo que anunciara su retirada tras los Juegos Olímpicos. Una retirada que duró unos meses. A pesar de que este bronce corresponde a 2012, la primera medalla olímpica que Beitia se colgó fue el oro de Río 2016. La saltadora puso fin a su carrera deportiva en 2017 por problemas físicos. Fue diputada regio"/>