José de Amézola y Francisco Villota hicieron historia en los Juegos de París de 1900, celebrados durante la Exposición Universal, y la segunda cita olímpica celebrada en el mundo. Se convirtieron en los primeros deportistas en colgarse una medalla de oro en la modalidad de pelota vasca de cesta. También fue la primera vez que la delegación española tenía presencia en unos Juegos. Curiosamente, la pareja española no llegó a jugar ni un solo partido. Todo por incomparecencia de la única pareja rival, los vasco-franceses Durquetty y Etchegaray. Ambos decidieron no competir por estar en desacuerdo con las reglas del torneo. Esta medalla fue reconocida por el Comité Olímpico Internacional en el 2004 tras un estudio —The 1900 Olympic Games: Results for All Competitors in All Events, With