El ciclista balear se plantó en Atenas con ganas de revalidar su título olímpico en la prueba individual de puntuación, tras un ciclo olímpico en el que se había alzado con el subampeonato del mundo de esta prueba en Stuttgart 2003. En la lucha por las medallas lanzó un primer ataque que secundaron el ruso Mijail Ignatiev, el alemán Guido Fulst y el francés Percke, quien quedó descolgado en un segundo ataque del español tras solo 20 vueltas. El ciclista balear fue pronto consciente de la fortaleza que demostraba su rival ruso Ignatiev, que se colgó el oro con 93 puntos, y optó por no arriesgar, puntuar en tres de los últimos cuatro pasos y asegurarse la plata. El bronce fue para el alemán Fulst, con 79 puntos, tres menos que el español. Tuvo tensiones con la Federación Española, que le impidió competir junto a Isaac Gálvez y le impuso a Miquel Alzamora como pareja en la prueba Madison por equipos, donde solo llegaron a ser sextos. Estas diferencias deslucieron su alegría por esta plata