David Cal buscaba ampliar su palmarés en Londres 2012, pero esta vez solo competía en 1000 metros. Los primeros tres cuartos de la final de Cal no presagiaban nada bueno: quinto al primer cuarto, sexto a la mitad y quinto al tercero. Ahí fue cuando reaccionó y, aumentando el ritmo palada a palada, alcanzó las 72 por minuto. Esto le valió para recuperar tres posiciones y cruzar la meta como medalla de plata. nda posición. Llegó a la competición en buena forma, tras estar concentrado 11 meses, junto a su entrenador Suso Morlán, en Cervo, para preparar allí esta cita en la que hizo historia. Se convirtió en el español con más metales en los Juegos Olímpicos, 'machada' que sigue vigente. Esta medalla supone su quinta presea olímpica: oro y plata en Atenas 2004, dos platas en Pekín 2008 y la plata de Londres 2012. En marzo de 2015, se retiró de la máxima competición al no encontrar más m