La guerra de Ucrania puede pasar en las próximas horas a una nueva fase. La defensa de Mariúpol se reduce ya a unas instalaciones industriales y la televisión de Moscú asegura que la ciudad está controlada por sus tropas. Ucrania mantiene que sus soldados se defenderán hasta el final, sin entregar las armas. Pero parece que ese final puede estar cada vez más cerca. La toma de Mariúpol dejaría todo el mar de Azov bajo control ruso, que conseguiría así unir el Donbás con la anexionada península de Crimea. La posición de Moscú, por tanto, se reforzaría -mucho- a la hora de negociar con Kiev. Ucrania denuncia que en el asalto a Mariúpol habrían muerto hasta 20.000 civiles. Todavía quedan otros 100.000 atrapados en esa ciudad portuaria. El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski asegura que si los últimos defensores mueren, su país no se sentará de nuevo a negociar con Rusia. Tras el parón de Semana Santa, se reanuda la actividad política. Los partidos reúnen hoy sus ejecutivas, después d
