Son vecinos de Lomo Negro, en Arona, Tenerife. Se manifiestan para defender sus viviendas, construidas en suelo rústico. Hoy estaba previsto el desalojo y derribo de dos casas, pero finalmente ha quedado aplazado. Son 450 viviendas, en las que viven más de 1.000 personas. Todas tienen orden de desalojo y derribo desde octubre. Más información en TVE Canarias