Desde los albores de la humanidad, los hombres han dedicado sus templos al sol y a su luz divina. Esta locura creadora conoció su apogeo en la Edad Media con las catedrales góticas y su increíble arquitectura de encaje de piedra y vidrio. En solo 150 años, los constructores de catedrales tallaron, esculpieron y amontonaron más piedras que los egipcios en 1000 años. Estos son los secretos de una aventura humana y arquitectónica en una era en la que todo parecía posible, marcada por las rivalidades, las innovaciones, las intrigas y los dramas. Una era que nos ha legado las más hermosas obras maestras de toda la cristiandad. La Basílica de Saint-Denis, consagrada como catedral en 1966, es el primer manifiesto de lo que más tarde se conocerá como el Arte Gótico;una obra maestra arquitectónica que no tardará en ser copiada, transformada y magnificada por toda Europa. Contenido disponible hasta el 22 de mayo de 2021.