En 1828 Champollion llegó a Egipto y, en el templo de Abu Simbel, conoció al más ilustre de los faraones del antiguo Egipto, Ramsés II. En los jeroglíficos, descifró su vida y ahora, 200 años después, la momia de Ramsés II marcará otro hito en esta aventura: mostrará al mundo su verdadero rostro.