Biopic musical de la trayectoria personal y artística de Peret, mostrando su faceta más desconocida e íntima. Parte de una saga familiar gitana que influirá en su música y que presidió su vida basada en un triunvirato que nunca le abandonó: la rumba, la familia y Dios. Peret inicia su carrera musical actuando en un chiringuito de Calella, con un ascenso profesional que le llevará al tablao "El Duende" donde se codeará con una comunidad de artistas, managers y famosos, y donde irá dando forma a lo que se conocerá como "rumba catalana" y le convertirá en una figura internacional. Su participación en Eurovisión 1974 le reportará éxito internacional, pero también conflictos personales con sus principios, su familia y su entorno profesional llevándolo a cambiar temporalmente la música por Dios. Regresa a la música con el encargo del Ayuntamiento de Barcelona para componer una canción para los JJ.OO. del 92, pero pese al éxito, decide retirarse junto a su familia y ser soberano de sí mismo: