Siglo XVI. La historiadora Lara Cabanes investiga el asesinato en extrañas circunstancias de Antonio de Román, un catedrático y fraile agustino maestro de un grupo de estudiantes liderados por el novicio Luis de León. Cabanes se sumerge en una época en la que la Universidad de Salamanca era lugar de intensos debates y diferencias entre profesores y órdenes religiosas, especialmente entre agustinos y dominicos, que podían llegar a dirimirse en los tribunales de la Santa Inquisición.