Miralles comprueba que lo que les ha dicho Gutiérrez es cierto: él no puede ser el violador que actúa ahora en el barrio porque se sometió a una castración química. Sin embargo, el violador, arrepentido de su pasado, les dará una información sorprendente que puede estar relacionada con el actual agresor. Alicia no deja de darle vueltas al descubrimiento de que el amante de su madre sea un cliente del bufete de su padre. Será incapaz de contarle sus preocupaciones a su novio Sergio, pero sí que se abrirá a Rober. Otro de los descubrimientos que ha hecho Alicia es que su madre le regaló a su amante un caro reloj de plata. Lo que ella no sabe es que Fernando Quintero, cliente de su padre, guarda en su caja fuerte un reloj que parece tener un gran valor sentimental para él. Salima dice a María y a Eugenio que Óscar, el hombre que ha aparecido buscándola, es un ex novio pesado. La