Todas las pruebas apuntan a que Quintero ha huido para no hacer frente a sus deudas, pero Miralles sospecha que hay algo más. Iker descubre que Argos ha conseguido hacerse con la lista de agentes infiltrados del CNI. Sheila tiene un encuentro con su padre, que acaba en decepción para ella. Hanna duda si dar una entrevista hablando sobre su pasado.