Miriam, a escondidas, trata de acceder al ordenador de Iván para boicotear el programa que le va a revelar la identidad del asesino de Alfonso Abad. Martina, tras acostarse con Rubén, le aclara que esa noche no significa una reconciliación entre ellos. Vega y Durán siguen a Quintero en su encuentro con el posible proveedor de armas. Descubren, frustrados, que se trata de una falsa alarma. Lidia y Néstor creen que Joel roba medicinas para venderlas. María decide contar a Néstor que se acostó con Quintero en el pasado.