Diana recibe la visita de Brian Green, un espía británico que le pide su colaboración en servicios de espionaje internacional usando la fábrica como tapadera. Blanca y Cristóbal viven con ansiedad los momentos previos a la declaración de éste ante el Tribunal Eclesiástico, esperanzados con lograr la nulidad matrimonial. Pero la declaración de Marina les aleja de su sueño. Adela se enfada cuando descubre que Germán ha invertido todos sus ahorros entregándoselos a don Wenceslao. Su marido la despreocupa. Hasta su hermana y su cuñado han invertido, pero Adela no puede dejar de mostrarse muy dolida. Menos mal que tanto ella como Blanca se llevan una buena noticia: el Secretario de Su Majestad la Reina les ayudará con el protocolo del acto por el cáncer de mama en nombre de la mismísima Doña Victoria Eugenia. Celia reprende a Elisa y la insta a que colabore en las labores d