Manuel exhorta a Carla a que deje en paz a Matilde y su familia a cambio del silencio de este. Los asuntos de doña Carla de momento quedan en secreto, pues la intención de Manuel es la de marcharse de Madrid. Por lo tanto, el apuesto y amable inquilino de los Garcés empieza a sentir que sus horas en casa de esta familia, igual van llegando a su fin. Los malos modos parece que se extienden, y don Fermín recibirá una punta de flecha de una tribu africana. A doña Carla estos métodos no le gustan y por eso conminará a Aguirre a que siga las directrices que ella le mande. Las malas formas de Miguel con Teresa han provocado que la encargada le cuente a Trini, que quiere hablar con don Salvador para conseguir el despido del librero, toda vez que se personó en casa del matrimonio para cantarle las cuarenta. Y como no hay quien adueñe a Esperanza, prefiere ponerse unos zapatos que le van pequeños antes que dar la raz&o