La familia Garcés ha conseguido un abogado y sin tener que recurrir a la ayuda de Íñigo. Éste les empieza a asesorar para que no den ningún paso sin que él lo sepa o autorice. De esta forma, Matilde por ejemplo podrá evitar más desprecios en La Moderna. Veremos al final en qué queda todo este asunto. Mientras, en el Salón de té, Teresa y Cañete siguen a la gresca entre ellos dos. Pero, además, ¿qué habrá pasado para que Cañete se levante un día en el sofá de Miguel y Trini? Supongo que no le faltarán sentimientos encontrados al respecto, algo similar a lo que le pueda ocurrir a Antonia, que tras librarse de Pilar Valladares, no sabe si ahora prefiere la estafa o que finalmente su Ramón le fuera leal. Y como a cada olla, su cobertera, Marta se verá en la necesidad de mendigar auspiciada por su tío Higinio. Por último, &Ia