Con tan solo decir su nombre, nos transportamos a un rincón del paraíso, Las Seychelles, un conjunto de 115 islas distribuidas por las resplandecientes aguas del océano Índico. Con el fin de mantener con vida estos paisajes de postal, el archipiélago entendió muy pronto la necesidad de convertir la conservación de su entorno, en una obligación nacional. Las consecuencias del cambio climático han reforzado este espíritu pionero y las islas tan desconocidas que nos disponemos a descubrir, se han convertido en santuarios naturales indudablemente dirigidos al ecoturismo.