En Tamworth se encuentra el cercano Cliff Hall, propiedad de la familia Willoughby, que había tenido vínculos con Kingsbury desde el siglo XVI. Transformaron esta casa de madera de estilo Tudor en una joya georgiana, añadiendo una extensión palaciana mucho más grande y dejando el edificio original como un ala. La casa de 13 habitaciones, aunque demolida en los años 60, contaba con cuidados jardines, pesquerías, establos, un palomar, un cobertizo para botes y una cochera... que no ha visto un carruaje de caballos... en mucho tiempo.