La fiesta sing sing reúne anualmente en Goroka, capital del altiplano de Papúa Nueva Guinea, a las tribus que habitan en la segunda isla más grande del mundo, separadas por una geografía accidentada y desprovista de vías de comunicación.
Durante el sing sing se concentran en el estadio de Goroka integrantes de cada tribu, aportando coloridos atavíos, cantos y danzas distintas. Como consecuencia, se mantienen las particulares tradiciones en las jóvenes generaciones de cada tribu y se potencia la paz entre ellas: el motivo común del sing sing celebra la independencia del hombre blanco.