El asesinato Miguel Ángel Blanco en 1997 supuso un revulsivo en la sociedad vasca, que pasó del silencio al basta ya frente al terrorismo de ETA. Hasta entonces, Gesto por la Paz y la Asociación por la Paz de Euskal Herria se concentraron en silencio contra la violencia terrorista. El programa cuenta con los testimonios de Cristina Cuesta, fundadora de la Asociación por la Paz de Euskal Herria e hija de Enrique Cuesta, delegado de Telefónica en Guipúzcoa, asesinado por ETA. Ella, junto a Txema Urkijo, miembro de Gesto por la Paz, abordan los inicios de los movimientos pacifistas y la década de los noventa, en la que ETA instaura la socialización del sufrimiento. Este capítulo se detiene en el asesinato del teniente alcalde de San Sebastián, Gregorio Ordoñez, en 1994 y que supuso un punto de inflexión en el movimiento pacifista. Quince días después de la liberación de Ortega Lara, ETA secuestra y asesina al concejal de Ermua, Miguel Ángel Blanco.