La constante presión migratoria que vive la ciudad autónoma ha llevado a la Guardia Civil a reforzar su plantilla. Son siete nuevos agentes, miembros de los GEAS, el Grupo Especialista en Actividades Subacuáticas. Llegan para reforzar el control de la inmigración ilegal por mar. Con ellos ya son 65 los guardias civiles llegados a Melilla para ampliar los efectivos. También se ha reforzado el equipo de TEDAX, al tiempo que permanecen en la ciudad los módulos de intervención rápida, especialistas en el control de masas.