En el pirineo navarro muchos pueblos vivieron durante años del contrabando entre Francia y España; hoy esos pasos entre dos estados de la unión europea son reconocidos como espacios de gran importancia natural y nos permiten viajar desde Extalar a Zugarramurdi, Urdax y la localidad francesa de Sare, visitando las cuevas de estas tres ultimas localidades, algunas de las cuales sirvieron para ocultar no solo el contrabando, sino, tal como cuentan las leyendas, akelarres practicados por brujas.