Una pareja construye una casa flotante superlarga en el corazón del país de los canales. Esta pareja amante del agua vive en un viejo barco de vapor y decide que es hora de modernizarse. Quieren una casa flotante para unirse a una pequeña pero bien establecida comunidad de casas flotantes en un canal, al sur de la capital, Ámsterdam, en los Países Bajos. Tras reunirse con un constructor experto en casas flotantes, deciden qué desean para su casa: un tejado elevado con vistas panorámicas, una moderna sala de estar diáfana y una cubierta envolvente para disfrutar del paisaje. El mayor reto a la hora de diseñar una casa flotante en los Países Bajos es asegurarse de que la estructura pueda hacer el viaje hasta su lugar de amarre. Una casa flotante debe atravesar una red de canales estrechos y poco profundos, con esclusas estrechas y puentes bajos.