Jesús decide hacer un nuevo reparto de las acciones de la empresa, incluyendo a Adela, que no tiene claro si aceptará. Mientras, Adela se afana en machacar a Celia quien, harta, termina por confesarle que Elías con ella jamás utilizó pastillas. Carla sigue trabajando para Jorge y estrecha los lazos con Celia: ambas están solas y han tenido una vida dura. Paolo, tras la comida con el grupo de amigos del mercado, se excede enviando memes y planes al grupo. Deciden echar a suertes el atenderle y Jorge acaba temiendo los planes que el italiano le ofrece. Javier baja sus defensas y acaba invitando a cenar a Germán. Se besan. Noa sigue intentando que su madre y Paolo puedan retomar su amistad, pese al estrecho control de Nacho.