El plan de Hortuño funciona y el mercado sufre un nuevo bache. Torturado por la culpa, Samuel está dispuesto a confesar la verdad ante Carla. Cristina intenta marcharse a Nápoles con Paolo para evitar quedarse a solas con Doménico. Valeria es informada de que su casa de Comillas será demolida si no la reforma. Jorge se acerca a Lorena y la invita a cenar. Celia está inevitablemente celosa. Adela siente la necesidad de ser independiente y buscar algo que la motive, la floristería de Cristina se convierte en su principal objetivo.