El Oro abandona sus escenarios privilegiados y llega a los barrios, despertando ambiciones, enfrentamientos y traiciones entre los clanes. Mientras Quino y Blanca se ven cada vez más lejos de sus respectivas familias, Darío encuentra un espacio para la paz en Ruth, la joven guardia civil madrileña.
En los barrios Los Cucos comenten una peligrosa imprudencia en la que se ve involucrado Monzón, que a partir de este momento tiene que empezar a actuar por sí mismo a espaldas de Darío. En cuanto a la investigación, Rocío, la hija del capataz de la finca encontrado al fondo de un barranco, está convencida de que su padre no ha muerto por accidente, y Blanca, Darío y Quino dan un giro al caso cuando descubran la posible existencia de ciertos negocios e intereses ocultos entre el comisario Esteban Sarabia y el padre de la víctima, Germán Castañeda.