Luis es un gris empleado de banca, tranquilo, paciente y buena persona, una de esas personas invisibles en las que nadie repara cuando uno se las cruza por la calle. Vive apocado por su mujer Úrsula, quien lo tiene completamente anulado. Cuando ella aparece muerta, la vida parece resolverse para Luis. A pesar de que es el sospechoso número uno, su coartada es irrefutable. Pero en esta ocasión, el olfato de Laura Lebrel puede verse anulado, ya que el interés que demuestra por el caso no es estrictamente profesional. Por primera vez en su vida, sus sentimientos hacia el sospechoso traerán inesperadas consecuencias. Mientras tanto, en comisaría, la investigación a la que Isabel está sometiendo a Jacobo está dando grandes resultados, alguien está informando de manera anónima a la policía de asuntos internos acerca de las irregularidades que ha cometido el comisario. Nuestros protagonistas tendrán que enfrentarse a un hecho inimaginable: uno de ellos les está traicionando, uno de ellos es e