Milan, 1506. Leonardo da Vinci está acusado de envenenar a Caterina de Cremona. Le declara su inocencia al oficial Giraldi, que comienza a interrogarle como acusado y a escuchar su historia. Hace muchos años, en Florencia, un Leonardo más joven es aprendiz en el estudio de Verrocchio, cuando conoce a Caterina. Tommasso, un compañero, intenta evitar que Leonardo se convierta en el primer aprendiz, pero Leonardo se obsesiona con perfeccionar su dibujo de Caterina. Poco después, es expulsado del estudio por pintar sin permiso. Caterina le muestra a Verrocchio la pintura que ha hecho Leonardo de ella, y el maestro le otorga el puesto de primer aprendiz y la oportunidad de ayudar en un nuevo encargo. Leonardo lo celebra con ella, pero se retira cuando la intimidad entre ambos se hace evidente y se siente abrumado. Durante la presentación del encargo, Leonardo rechaza una oferta de Ludovico Sforza para pintar para él en Milán y más tarde se siente herido al ver a Caterina y Tommaso juntos.