“Es un espíritu libre y una buenísima persona”. “Puede parecer que ha tenido una vida muy privilegiada, pero ha tenido también una vida muy difícil”. Así la definen Carmen Martínez Bordiú sus hermanos Francisco Franco y Jaime Martínez-Bordiú. Retirada desde hace unos años en la Riviera portuguesa, sus exclusivos testimonios ilustran el presente y el pasado de la primera nieta del dictador Francisco Franco. Una niña que nació para ser princesa y que creció tras los muros del Palacio del Pardo, de donde pronto quiso huir.