El chef Gonzalo D'Ambrosio viaja a Murcia, al Altiplano de Yecla-Jumilla, un lugar que destaca por su particular ubicación, un cruce de caminos entre la meseta y la costa que limita con las provincias de Alicante y Albacete, dos tierras vecinas que le ha contagiado su carácter, tradición y gastronomía. En esta ruta Gonzalo sale a los cerros de Yecla para aprender a seguir el rastro de la perdiz e intentar cazar a esta ave, cuya carne forma parte del tradicional gazpacho yeclano. En Fuente del Pino recoge y prueba el membrillo y en La Alquería tiene la oportunidad de conocer la cabra murciano-granadina y de degustar platos elaborados con su leche. De nuevo vuelve a la huerta y de nuevo tiene que remangarse para trabajar y recoger aceitunas y uvas, antes de ir al lagar a aprender a prensarla con sus pies. Su ruta termina con una receta en la que reúne todos los sabores que fue conociendo a lo largo de su ruta, unas chuletas de cabra guisada con aromáticas.